El diseñador de producto participa en nuestra vida diaria con la realización de proyectos de los objetos que están a nuestro alrededor y que utilizamos todos los días. Una mesa, una silla, un frasco para un perfume, un envase de cartón o la funda de las gafas, como tantos otros objetos cotidianos, serán productos desarrollados, diseñados y proyectados por los futuros Graduados en Diseño de Producto. Las competencias que irán adquiriendo en estos estudios, les van a permitir plantear y definir proyectos complejos de diseño a través de los cuales podrán desarrollar desde un objeto muy especializado para un uso más o menos técnico, hasta las cosas más cotidianas y habituales con las que nos topamos todos los días.