Al final de su proceso de formación todos los estudiantes deberán estar en condiciones de ejercer las siguientes competencias:
Desarrollar la capacidad de razonamiento autónomo.
Tener consolidados hábitos de autodisciplina, de autoexigencia y de rigor.
Ser capaces de trabajar en equipo.
Comprender e interpretar de manera pertinente y razonada textos de carácter económico y académico.
Aplicar el razonamiento económico en la toma de decisiones.
Conocer los diferentes contextos en los que trabaja: la coyuntura económica, el sector, el mercado y la empresa.
Dominar las herramientas informáticas y sus principales aplicaciones para la actividad académica, así como dominar el lenguaje matemático y estadístico.
Ser capaz de buscar, recopilar y analizar información y datos, evaluando la relevancia y la validez.
Comprender las estrategias microeconómicas y sus implicaciones en la gestión.
Identificar situaciones de optimización de recursos y costes.
Comprender las variables macroeconómicas que regulan la economía y su interrelación con la gestión de las empresas.