Al terminar estos estudios, el graduado puede trabajar en tareas de gestión, coordinación, ejecución y asesoramiento en las Administraciones Públicas, instituciones políticas y otras organizaciones de carácter público que operan en el ámbito europeo, estatal, autonómico y local, a las que accede mediante oposición o contratación. Y también como gerente de organismos autónomos, entidades públicas empresariales y fundaciones públicas.
En el ámbito privado, el graduado en Gestión y Administración Pública resulta especialmente atractivo en empresas consultoras, asesorías, banca y entidades financieras, empresas concesionarias de servicios públicos, empresas contratistas de la Administración, asociaciones, fundaciones, colegios profesionales, organizaciones no gubernamentales y entidades que, en general, tengan un contacto continuo con las Administraciones públicas, por el conocimiento especializado que de éstas tiene.