Existe un una alta empleabilidad de ingenieros informáticos especialmente relacionada con la introducción de novedades tecnológicas.
La titulación proporciona una formación amplia y sólida para enfrentarse a problemas de cualquier ámbito de la informática y para resolverlos aplicando métodos y técnicas de la ciencia y la ingeniería. Estos profesionales son capaces de construir, implantar, verificar, evaluar y mantener sistemas informáticos complejos que respondan a las necesidades de sus usuarios.
Se trata de una profesión de alta cualificación y reconocido prestigio, tanto en el ámbito social como en el económico, y con grandes perspectivas de empleo.
Su formación les proporciona una versatilidad que les permite aprender y utilizar efectivamente técnicas y herramientas que surjan en el futuro. Esta versatilidad les hace especialmente valiosos en organizaciones en las que sea necesaria una innovación permanente o con fuertes componentes de investigación, desarrollo e innovación.