La necesidad de profesionales de la Sociología se extiende actualmente a una amplia variedad de ámbitos e instituciones, desde los más clásicos como la investigación de la opinión pública, los problemas de integración social o los procesos de socialización hasta otros más nuevos como la evaluación de políticas sociales, el desarrollo local, la gestión de recursos humanos o la cooperación para el desarrollo. Los sociólogos analizan distintos grupos, instituciones sociales y procesos sociales como la familia, los jóvenes, los mayores, las migraciones, el mundo de la dependencia o la incorporación de las mujeres al mundo del empleo. Estudian hechos sociales (¿cómo es la sociedad?) y percepciones sociales (¿cómo se percibe la sociedad?), aportando diagnósticos y propuestas de mejora.