Educación quiere conseguir una mayor transparencia en la Universidad
Una mayor cantidad de información facilitará a los estudiantes la elección de sus titulaciones.
El Ministerio de Educación ha presentado un informe en el Congreso en el propone que la Universidad ofrezca a la sociedad un informe bienal que incluya dónde están los mejores equipos docentes en cada carrera, dónde se encuentran los expertos investigadores o cuáles son los centros más activos en innovación.
Esta iniciativa se dirige principalmente a los estudiantes para que, a la hora de decidir su futuro profesional, cuenten con la mayor cantidad de información posible y no se guíen por sus intuiciones o por la nota de corte.
Actualmente, las titulaciones tradicionales como Derecho, Periodismo, Económicas o Psicología siguen siendo las más demandadas mientras que otras como Ingeniería de Materiales o Forestal son las que menos interés suscitan.
Sin embargo, las más demandadas no siempre son las que tienen mayores salidas profesionales. Los estudiantes de las titulaciones de Económicas, Informática, Ingeniería Técnica Industrial o de Telecomunicaciones son los que más fácil lo tienen a la hora de incorporarse al mundo laboral.
Año tras año, Medicina encabeza las listas de las carreras más demandadas. En 2009, la nota de corte para el acceso a esta titulación ha sido muy elevada: un 9.09 en la Universidad de Oviedo, un 9,04 en la Universidad de Granada y un 8,83 en la Universidad Complutense de Madrid.
La gran demanda frente a la escasez de plazas es la razón fundamental de que los alumnos que deseen estudiar esta titulación tengan que obtener una nota casi imposible.
Por ello, muchos se quedan cada año a las puertas, un elemento que favorece a incrementar la reputación de esta profesión, a pesar de que luego no sea una de las que mayores oportunidades laborales ofrezca.
Con este nuevo sistema, la carrera con mayor nota de corte no tendría por qué ser la más prestigiosa, sino que ese papel lo determinarían otros factores como el tiempo medio que tardan los estudiantes en terminar la titulación, la tasa de abandono en los primeros cursos o las salidas profesionales de cada carrera.
Actualmente no hay ningún informe que facilite una comparación entre las facultades. Ahora, con este nuevo proyecto el Gobierno quiere hacer posible que cada dos años la sociedad pueda disponer de un balance que valore los resultados de las universidades y dé a conocer cuál es la rentabilidad del gasto público destinado a esta partida.
De esta forma, este sistema permitiría realizar una correcta toma de decisión por parte de los estudiantes además de fomentar la competencia de los centros universitarios.