Las universidades españolas más productivas

El “Ranking de 2011 en producción y productividad en investigación de las universidades públicas españolas", elaborado por investigadores de la Universidad de Granada, evalúa a las universidades españolas basándose en los siguientes parámetros: artículos publicados en revistas, tramos de investigación, proyectos en I+D, tesis doctorales, becas concedidas por el Ministerio de Educación, Doctorados con Mención hacia la Excelencia y Patentes.

Tras analizar estos indicadores se establecieron dos resultados: producción global y productividad. Los primeros puestos del ranking de producción están encabezados por la Universidad de Barcelona, la Complutense de Madrid y la Universidad de Granada. En el caso del ranking de productividad, los tres primeros puestos los ocupan la Universidad Pompeu Fabra, Pablo de Olavide y la Rovira i Virgili.

Existen grandes diferencias en cuanto a los recursos humanos con los que cuentan las universidades españolas, pero también difieren en la productividad de estos recursos. Por ejemplo, la Universidad Complutense de Madrid ocupa el segundo puesto en el ranking de producción, pero el puesto 29 en el de productividad. A su vez, las primeras universidades en los puestos de productividad ocupan los puestos 28, 38 y 27, respectivamente.

Otras universidades han mejorado en los rankings que ha elaborado la universidad de Granada, como es el caso de la Universidad Politécnica de Cartagena o las universidades de las Islas Baleares. Por el contrario, universidades como la Complutense o la Universidad de Oviedo han ido bajando puestos en los años sucesivos. Las razones de estos cambios pueden encontrarse tanto dentro de las propias universidades como en las comunidades autónomas en las que se ubican, así como en la financiación que se dedica a la educación universitaria.

Desde el informe del ranking señalan que una de las críticas que se atribuye a la investigación científica que se lleva a cabo en España es su caso impacto y visibilidad a nivel internacional. De hecho, en el Ranking Shangai aparecen 11 universidades españolas tras el puesto 200, por lo que señalan que nuestras universidades no pueden competir con las de otros países. Defienden que para mejorar las posiciones en los rankings y dar visibilidad internacional de la ciencia de España hay que aumentar la financiación que se destina a los proyectos de investigación, pero que en un contexto de crisis económica es muy difícil que eso cambie.